Cronicas de un Enano en el Exilio

La luna esta alta en el cielo, llena, blanca, son un brillo casi audible, un susurro detras de mi cabeza, una llamada, como el aullido de un lobo que llama a su manada a la caceria. Hoy no lo puedo contener, tiene que ser hoy, tiene que empezar esta noche.

Durante mucho tiempo lo he contenido, esperando a estar listo, preparado para las consecuencias. Esta noche de luna llena lo estoy, voy descubrir que se siente robarle la vida a otra persona.

Me pongo mi atuendo de casa, unas botas que aumenten ligeramente mi estatura, una gorra con peluca que finja una melena que no es la mia, una camisa holgada para dicimular mi figura, con hombreras para aumentar el ancho de mi espalda, unos lentes de motura gruesa que deforman la vision de mi cara... y lo mejor de todo, el amparo de la luna que distorciona mi imagen... la luna me protegera.

Salgo a recorrer las calles como un lobo, un cazador, no una obeja, no un simple contandor sin nombre en una empresa apersonal, hoy yo soy el macho alfa de la manada. Pero trato de mantenerme en las sombras, caminar sin levantar sospechas hasta llegar a mi citio de caza, un barrio "bohemio" en la periferia de la gran ciudad, donde la ley hace de la vista gorda para no ver los vicios de su clase pudiente.

Sentado en el mismo lugar de siempre esta mi presa, oscuro y alejado de el bullicio, un joven emo, de no mas de 25 años, son facciones demacradas de alguien a quien no le da el sol, la vista ensimismada en su eterna autocompacion, finjiendo leer el mismo libro de siempre...

Me acerco a el por el angulo ciego, sin hacer ruido, saco mi cordel de pesca y lo cruso alrededor de su cuello, hago presion esperando que se desvanesca... nada pasa, el joven ni se inmuta, apenas se se mueve, no deja de finjir ver su libro...

Hago mas precion, dejo que la furia que corre por mi garganta y pecho sea descargada en el cordel, pero nada pasa, el joven ni se inmuta....

Apoyo mi pie sobre su espalda, para apalancar mas mi fuerza, todo mi peso va dirigido al nudo en su cuello... no pasa nada, el joven apenas si se inmuta.

Mis brazos comiensan a perder su fuerza, mis dos piernas (ahora apoyadas ambas sobre su espalda) estan perdiendo el equilibro, no puedo mas, debere desistir de mi intento...

- Da gracias a que ya comi y que no me gusta matar solo por placer.

Me quedo de piedra, la voz sale de el sin necesidad de mover ningun musculo... suelto el amarre y me dejo caer en el suelo, con una mezcla de sorpresa y terror. El joven se voltea un poco en su lugar hasta verme directamente a los ojos.

- Es muy estupido querer ahorcar a un vampiro, sabes.

No se que decir, su piel tiene un color diferente, sus ojos carecen de vida, su moustrosidad es evidente estando tan cerca, es como ver un cadaver moverse... aunque apenas si mueva los labios para hablar.

-da da ddaaa aaaaa- es el unico sonido que sale de mi boca.

-Vete ahora, antes de que me vuelva a dar ambre y no vuelvas a molestarme.

Aturdido, asustado y humillado me levanto como puedo intentando no miralo directamente. Le doy la espalda y me preparo para correr. Pero entonses un pensamiento fugas domina mi mente, el cazador no a sido aplacado por completo...

- essste. Eh, si, si, bueno, si tu no... no estubieras ya muerto... yo, bueno ...

- Si no fuera un vampiro me abrias roto el cuello, un buen agarre el tuyo debo admitir, solo procura elegir tus victimas con mas precaucion la proxima ves...

Ahora con una extraña sensacion de triunfo me alejo, me adentro en la noche, a esperar la proxima luna llena, no la certesa de que entonses podre empezar.